jueves, marzo 16, 2006

El Fundamentalista Ateo y sus Graciosas Contradicciones

Algo que me parece interesante de internet es que puedes encontrar a gente con opiniones dispares, incluidas las más disparatadas. Un caso concreto es lo que yo etiqueto de fundamentalista ateo.

¿En qué consiste su discurso?

En realidad es muy simple. Básicamente consiste en la creencia y afirmación de que la religión, en cualquiera de sus manifestaciones, se debe a la estupidez humana generalizada y a la maldad de unos cuantos que se aprovechan de los demás.

No vale la pena analizar excesivamente afirmaciones que salta a la vista que surgen de problemáticas emocionales. Es evidente el patrón básico del fanático que configura sus opiniones basándolas en un todo-nada, bueno-malo, conmigo-contra mí.

En realidad, no tienen nada de particular estas afirmaciones porque se puede entender que formas de vida simples den explicaciones de la realidad simples y respondan de forma simple.

Lo preocupante y el máximo de lo grotesco se alcanza cuando la misma persona que hace esas afirmaciones se define como racionalista y defensor del pensamiento crítico.


Peor todavía cuando puedes observar que otros que se definen como racionalistas o escépticos, no le responden y le siguen la corriente....¿Será por miedo? ¿O es que abunda este tipo de gente entre los que se definen como racionalistas y escépticos? No lo sé, pero me da miedo.

Me pregunto de forma ingenua:

¿Seguro que todos los que tienen algún tipo de creencia religiosa son estúpidos? ¿Puede alguien garantizar que están absolutamente equivocados en todo? ¿Seguro que todos los que tienen un cargo clerical son malos? ¿Son más o menos malos o estúpidos que esos ateos que hacen afirmaciones tan simples como llenas de odio irreflexivo?

¿Hay algún destello de racionalidad en alguien que pretende explicar un fenómeno humano universal como el religioso con un par de afirmaciones tan simples como cargadas emocionalmente? Lo dudo. Salta a la vista la simpleza de esas afirmaciones y la exacerbación de la peor de las emociones.

Al margen de la inutilidad de usar el insulto como argumento, el basar el análisis de un fenómeno humano en un par de valoraciones éticas, no nos aporta nada ni nos da ninguna información. No nos sirve para entender y mucho menos para cambiar nada. Además, habría que ver la "base empírica" y la "racionalidad" del supuesto racionalista que juzga moralmente a los demás. Las valoraciones éticas suelen estar bastante repletas de emociones.

En algo estoy de acuerdo con esta gente. Abunda la irracionalidad y la superstición. Sería interesante que aumentara la gente que tuviera la razón como un valor importante.

Soy también pesimista como ellos. Ahora bien, mi pesimismo es mayor que el de ellos porque muchos de los que se consideran racionalistas dan abundantes ejemplos de irracionalidad. El que hemos comentado es un ejemplo.

Prefiero no imaginarme una sociedad dirigida por semejantes "pensadores críticos" y "racionalistas". Me da miedo.
¡Que Dios nos libre!


1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, buenas. Mi nombre es Alexis y debo decir que estoy completamente de acuerdo en todo lo que comentas en el artículo. El hecho de declararme publicamente deísta ha desencadenado muchas reacciones hacia mí como la que describes por parte de algunos que se niegan a comprender que puede haber algo más fuera de las explicaciones que nos brinda la ciencia, y que ésta y Dios no son conceptos incompatibles.

Un saludo!